Continúan las indagatorias en el Juzgado Federal de San Rafael por el escándalo de las pensiones por invalidez truchas que llevaba adelante la falsa gestora de Anses, Norma Bravo, sindicada como cabecilla de una banda dedicada a defraudar al Estado.
Este martes fue el turno de presentarse a indagatoria el esposo de Bravo, Ernesto Ochoa, y de su hija Carla Ochoa, abogados ambos quienes se abstuvieron de prestar declaración.
Los dos letrados están dentro del grupo que es sospechado de integrar la banda dedicada a la realización de trámites de pensiones por discapacidad falsos que operaba en nuestro departamento.
Este miércoles deberá presentarse el psiquiatra Damián Fernández Bianchi, que trabaja en el área de Salud Mental del Schestakow, ya que su firma aparecería en algunos certificados que presentaba Bravo para poder adquirir las pensiones, y también lo hará Antonia Bravo, empleada pública.
Para el jueves fue citado el traumatólogo Javier Hernández, allanado en los consultorios externos de la Policlínica Privada y que también forma parte del plantel médico del hospital público y luego lo hará su colega, Sergio Pascuttini, que es el tercer profesional imputado en la causa y al que le allanaron su domicilio particular.
El caso
Todo comenzó con los 11 allanamientos que se realizaron la semana pasada por parte del Juzgado Federal de San Rafael, a cargo del Dr. Eduardo Puigdengolas, ante la Secretaría Penal a cargo del doctor Carlos Boldrini, donde se logró la detención de cinco mujeres y tres hombres.
Además, se secuestraron más de 70 cajas de medicamentos, 462.650 pesos, 400 dólares, gran cantidad de recetarios médicos, 8 computadoras, 2 Notebook, 1 Tablet, 10 teléfonos celulares y documentación de interés para la causa.
Los detenidos quedaron a disposición del magistrado interventor en la causa caratulada “Defraudación a la Administración Pública” (Art. 174 C.P.) y “Asociación Ilícita” (Art. 210 C.P.)”.
Fuente:mediamendoza